Uno de los principales alicientes del sendero homologado PR-G 197 -el llamado Reto Codeseda-Sabucedo– se está convirtiendo en un factor que está disparando las labores de mantenimiento del trazado en perfectas condiciones de señalización. El ganado salvaje que puebla los montes por los que discurre la ruta ha encontrado en las señales instaladas en las zonas de monte abierto que cruza un complemento ideal para rascarse. Lo que en tramos de menos altura suelen hacer contra los árboles, en monte abierto lo hacen ahora contra las estacas que sostienen las señales de la ruta. Y, al hacerlo, con cierta frecuencia las derriban.
Es una circunstancia que se repite y que, al principio, llevó a que se barajase incluso la posibilidad de que alguien disconforme con la puesta en marcha de este sendero -homologado este año por la Federación Galega de Montañismo bajo el nombre de PR-G 197 Codeseda-Rapa das Bestas- pudiese estar boicoteándolo.
Analizada la situación y revisados los indicios -la reiterada presencia de pelos de reses y de suciedad en la parte superior de las estacas derribadas- se descarta el boicot que se temían los numerosos senderistas que en los últimos meses han recorrido la zona y también las entidades vinculadas a la puesta en marcha del trazado.
Así lo confirmaron fuentes de Codeseda Viva, que indicaron que se ha llegado a la conclusión de que son las propias vacas y los caballos salvajes los que derriban las señales al rascarse.
Eso explicaría por qué las estacas derribadas se encuentran siempre en la misma zona: la de monte abierto radicada en la de mayor altura del trazado, es decir, entre A Grela, Sabucedo y As Quintas.
Es precisamente la zona donde, debido a la ausencia de robles, castaños o piedras sobre los que realizar el marcaje se ha optado por instalar las citadas estacas. Personal del Concello de A Estrada se está encargando de reponer el grueso de las señales derribadas pero Codeseda Viva también acude con cierta frecuencia a restaurar a su antiguo estado las estacas derribadas de las que los propios senderistas le alertan a través de la web.
También es esta vía la elegida por muchos usuarios para hacerles llegar sugerencias. Una reiterada es que, aunque les parece una ruta muy atractiva, todavía lo sería más si discurriese por el interior de las frondosas robledas que se ven desde el trazado. Y, en este punto, Codeseda Viva siempre les responde indicándoles que no es posible marcar el trazado por esas zonas de bosque arbolado debido a que se trata de propiedades privadas. Y el trazado homologado por la Federación Gallega de Montaña tiene que recorrer exclusivamente caminos o terrenos de dominio público.
Texto basado en una noticia de Silvia Pampín publicada en Faro de Vigo el 26/11/2018