Vecinos de la aldea de Vilaboa, capturaron el pasado jueves -y retienen desde entonces- a cuatro caballos salvajes que llevaban varias semanas pastando en sus prados y causando daños. Los animales, dos caballos y dos yeguas sin marca alguna, están encerrados en una casa.
Los vecinos esperan que aparezcan sus dueños y se los lleven, comprometiéndose a no dejarlos sueltos en la zona. De lo contrario, presentarán de inmediato una denuncia, e iniciarán el proceso que acabará, al final, con la subasta de los animales.
En dicha aldea, con apenas diez casas habitadas durante la semana, ya tienen sobrada experiencia en padecer daños por animales salvajes o mostrencos que entran en sus tierras y explotaciones agrícolas. En varias ocasiones retuvieron a animales y consiguieron indemnización por daños o subasta de los animales.