La Asociación Amigos do Camiño recomienda a los peregrinos que no sigan el trazado de la Geira por culpa de los sabotajes con las señalizaciones.
Finalizando ya el mes de agosto, el Camiño da Geira e dos Arrieiros ha registrado únicamente 700 peregrinos en lo que va de año. Es una cifra que dista mucho de lo esperado teniendo en cuenta que es año Xacobeo. Estos números tan bajos no sorprenden sin embargo a la asociación de Amigos do Camiño da Geira e dos Arrieiros, que tomó el testigo de la asociación Codeseda Viva en la defensa de este trazado que arranca en Braga y llega a Santiago pasando por Forcarei y A Estrada.
Según explican, los bajos números responden al mal estado del camino, con municipios que no están realizando las necesarias tareas de desbroces y mantenimiento, y también a los sabotajes que están sufriendo con la señalización y que ya han provocado que varios grupos de peregrinos se perdiesen. Ante esta situación, la asociación ha comenzado a recomendar a los peregrinos que se dirigen a ellos en busca de ayuda e información, que no realicen este camino mientras esta situación no cambie.
Desde la entidad explicaron que el año comenzó con todo el camino bien señalizado, excepto en la zona del Ribeiro, donde desde el principio tuvieron problemas con la retirada de sus señales. Sin embargo, era solo un tramo de unos 20 kilómetros que los peregrinos ya afrontaban avisados. Ahora sin embargo, esos problemas se han extendido también al concello de Forcarei. En este municipio se colocó una nueva señalización este año. Lo hizo un grupo portugués de peregrinos, ya que el gobierno local del Concello de Forcarei decidió señalizar el camino Miñoto-Ribeiro, pero no el de la Geira, a pesar de haberse comprometido hace unos dos años. Ahora, la mayoría de esa señalización ha sido arrancada. Sin embargo, y lo que es peor, a lo largo del camino se han encontrado varios casos de señales que han sido cambiadas para llevar a los peregrinos por caminos equivocados.
De esta manera, el camino se encuentra con que tiene dos importantes zonas sin señalización y tampoco pueden fiarse de las que ya hay colocada. Desde la asociación explicaron que estos problemas comenzaron a conocerse entre los peregrinos y hubo grupos que descartaron realizar esta ruta. Otros terminaron por no venir por las recomendaciones de la propia asociación, que teme que los peregrinos puedan perderse por una mala indicación. Además, reconocen que estos problemas se suman a otros como la falta de lugares para dormir en algunas zonas.
Consideran que en estos casos debería ser la Xunta la que regulase las señalizaciones y su mantenimiento, no los propios municipios y las asociaciones.
“El camino está peor que en el año 2017”
En estos momentos un grupo de jinetes está realizando por primera vez el Camiño da Geira entre Braga y Santiago. Esta siendo una peregrinación marcada por el fuerte calor pero también está teniendo muchos problemas por culpa de la falta de señales y el mal estado del trazado. “El camino está peor que en el año 2017, cuando lo hicimos el tramo gallego”, explica Vicente Pereiras, responsable de esta iniciativa puesta en marcha por la asociación Rapa das Bestas. Precisamente ayer, los jinetes y sus monturas llegaron a Sabucedo, donde hicieron noche. Allí, Pereiras nos explica que a lo largo del camino se han encontrado con muchas zonas en las que la señalización del Camiño da Geira fue arrancada, pero no la de el Miñoto-Ribeiro. Lo peor sin embargo es que muchas señales se cambiaron de sentido a propósito. En su caso, se perdieron siguiendo una de estas señales y se dieron cuenta varios kilómetros después, teniendo que desandar el camino. “Ahora mismo no se puede hacer sin seguir el móvil. Además, hay muchas zonas que los concellos no limpiaron”.