Un helicóptero de la Guardia Civil sobrevoló ayer por la mañana el río Umia a su paso por varios municipios y avistó una gran mancha de lodo de unos 300 metros de longitud en el lugar de Marcenlos. Este extremo fue confirmado también ayer por fuentes municipales de Cuntis, que inspeccionaron a pie la zona.
La actuación de la Guardia Civil se desarrolló a raíz del vertido de tierra y lodo que el martes a última hora de la tarde se filtró al Umia y acabó afectando a la captación municipal de Sebil y las reservas de agua potable de la localidad. El Concello anunció ayer que denunciará a la empresa que ejecuta las obras de servicio de la concentración parcelaria de Codeseda, a las que atribuye el contratiempo.
El concejal de Obras y Medio Ambiente de Cuntis, Manuel Campos, indicó que la denuncia contra la UTE Dago-Atlántica por los costes derivados del vertido se interpondrá una vez que esté listo el informe encargado a la Policía Local. Ni la Consellería de Medio Ambiente ni la de Medio Rural se pronunciaron ayer sobre la causa del vertido que tiñó de marrón el cauce. No obstante, técnicos de ambos departamentos autonómicos sí se desplazaron a la zona e inspeccionaron el río. Un portavoz de Medio Rural señaló que aunque la consellería financia las obras de la concentración parcelaria de Codeseda, la dirección y ejecución corresponde a la Sociedade Pública de Investimento (SPI), dependiente de la Consellería de Economía.
Medio Ambiente solo indicó que unas obras próximas al río provocaron una turbidez en el agua por áridos. Técnicos de Augas de Galicia tomaron muestras y se abrió una investigación. La actuación de la consellería se limita a eso, ya que finalmente no fue necesario adoptar otras medidas para garantizar el abastecimiento a Cuntis y al municipio de Moraña, que comparte la captación y la depuradora.